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domingo, 15 de enero de 2023

Epifanía de la moral y las luces, ¡Democracia de la Calle!


Interpretando la historia de los de abajo.

 

Luis A Ramírez

 

I.

El día 09 de enero, docentes de todo el país dieron una demostración de "forces propers”; hasta ese día todo había sido calma, llegó el séptimo y la resignación se volvió fragua, se tragaron el miedo y calentaron la calle. La revuelta de obrer@s y trabajador@s de la enseñanza fue de un todo para todos.  El 9 de enero para la historia será "una revuelta social de la moral y las luces". Un presente potencial está convocando a un ciclo largo de luchas; un "compromiso histórico" desde los subalternos apenas está naciendo y de ahora en adelante la realidad será de luchas. Si la dialéctica murió en las ruedas del casino, en la calle ha vuelto a la vida en 'la rueda de la historia' empujada, por las fuerzas productivas, soberanas, autonomas y beligerantes de los trabajadores, "las luchas de los trabajadores es obra de los trabajadores mismos”.

 

II.

El antecedente inmediato a este furor de los de abajo  fue la aprobación del infausto instructivo  de la ONAPRE;  en esa oportunidad los trabajadores quebraron lanzas y el gobierno se aterrorizó, la candelita de la calle se hizo un volcán a cielo abierto y antes que la lava caminara, declararon la intervención de la ONAPRE, la astucia presentó una comedia. El jefe de la ONAPRE resultó un agente enemigo. Aquí lo importante por destacar es labor pedagógica de agitación, movilización y acumulación de fuerzas como el  antecedente inmediato de la movilización del 9 de enero del 2023. De cualquier modo las movilizaciones por los derechos sociales y contra dispositivos legales de la ONAPRE fueron un aprendizaje al cuerpo que hoy calienta las calles y se agita en el vía crucis. La dialéctica entre la resignación colectiva y el fraguar de la pelea  por la vida colectiva es  memoria colectiva enriquecidad. En esta coyuntura si la enunciación de la memoria histórica  no se enriquece con la lucha de las trabajadores, terminará siendo transmutada a lápida gris del cementerio. En la memoria viva se viene tejiendo el aprendizaje y el reconocimiento de fuerzas populares, con la convocatoria  de "la moral y las luces" llegó a la superficie la indignación de los de abajo. El hombre de la calle ya está indigestado

del despótico político  autoritario, que nos dice tras el micrófono ¡Calénsela!.

 

III.

La crisis del consentimiento del gobierno está a flor de piel y su legitimación política ante las bases sociales demuestra reveses, la consiguiente crisis ético política de sus liderazgos traduce una situación de gobernabilidad inestable. En ese contexto las subjetividades en lucha son potencia en la acumulación de fuerzas desde los conflictos sociales. Y el supuesto de labrar una bifurcación intempestiva de la historia, además de lógico es históricamente irreversible. La combinación de múltiples fuerzas de los trabajador@s, maestr@s y profesor@s el 09 de enero validó, la pedagogía de la agitación política y movilización del 2022. La vocación por cambiar la historia ha cobrado impetuosidad clasista, autónoma y beligerante;  la guarita de Sanare desde la filosofía de la práxis ha dicho la tuerca de la historia dio una vuelta.

 

Sólo un espíritu anquilosado en la teoría barata de la conspiración y con esa capacidad magistral de fosilizar su cerebro intenta hurtar la verdad concreta: ¡Las masas del barrio y del campo están mamadas!. Una vez más las representaciones del 'Estado político' -gobierno y oposición- ambos en descomposición irreversible quedaron mal parados, la convocatoria de la calle inauguró un nuevo ciclo de luchas desde los explotados de la sociedad, Señores,  tienen el poder político, pero perdieron la calle. Están en el escenario pero perdieron la dirección moral e intelectual, ¡la clase trabajadora! insurge como sujeto político con lo cual el sentido de la realidad concreta provocará partos impredecibles.

 

IV.

Después de la movilización nacional, la obediencia ciega  esta consciente de que el antagonismo social, es el centro de la contradicción principal, En las conciencias populares el "aparato psíquico" sobre la base de la angustia, el miedo, el temor y la disciplina despótica, hizo trizas y ver a las masas saltar el corral de la resignación les causó un revolcón. 

 

Es certeza de que lo real se hizo  móvil, pero el pensamiento del funcionario alienado de verdades sagradas quedó inmovilizado. El abstraído de lo real, no da cuenta que la calle a legitimado una Causa Social con potenciales geométricos. Después del 09 de enero, las subjetividades en lucha multiplicaron las emociones, el acontecimiento despertó al cuerpo colectivo.

Por lo cuál ilustró la agitación de las concentraciones, desde poder ver al megáfono doblado a  metralletas de palabras, seguido por el enardecido espíritu inflando los pechos y pechugas de la rabia, escuchar las consignas que llegaron al oído desobediente, ver la maestra libertaria quien salió de los rituales burocráticos y se incorporó a la asamblea obrera de Guayana, encontrarse con  las mujeres libertarias reclamando la libertad de sus hombres, en el portón de la siderúrgica,  y conocer de los aplausos en los videos y del canto evocando recuerdos en fin en la escuela de las calles y avenidas el contenido vuela y desborda las letras, el cuerpo está creciendo del espíritu libertario, popular y de desobediente. Se necesitan unos cuantos manifiestos para describirlo.

 

La realidad es que las calles se calentaron  con acentos de indignación y la burocracia tembló.   El día en que los lápices se fueron a las calles, desembocaron en un levantón moral para las subjetividades en lucha;  SI,  de las conciencias que vienen cuestionando al burócrata, las que impugnan al despotismo del forajido de la política; en fin,  las que se movilizan por las conquistas obreras.

 

Entre los impactos a la subjetividad popular tenemos que el cuestionamiento a la política oficial desde del barrio venezolano ya no remite a la forma de resignación pasiva. La conciencia de rechazo al paquetazo económico se sintió representada en la movilización de las principales ciudades del país: Caracas, Cumaná, el Tigre, Maracay, Valera, Valencia, Lara, Acarigua, Puerto Cabello, Puerto la Cruz y los destacamentos de obreros en Guayana. Sobre estos últimos, la represión dejó ver su olorosa guaya, resulta que el camino a la dignidad molesta a los poderosos, pero la movilización obrera respondió al gobierno neoliberal y enseguida cobró efectos moralizantes, la movilización resultó un signo de reafirmación productiva de la política dirigida por los de abajo, en ese marco es válido recordar  la dialéctica materialista en su aforismo <<todo lo que empieza nace de lo que se terminó>>.

 

V.

Ahora la paradoja digna de memoria histórica, es que las clases populares comenzaron el año dignificándose desde la "Democracia de la Calle", desde la democracia real sin dirigentes ni dirigidos. Mientras que la clase política en el poder, se ufanaba  de que la  transición decembrina estaría cargada de   casinos, bodegones, casas nocturnas, centros hípicos y juegos de envite y azar, el dramatismo social reveló un suplicio borrascoso:  La casa del pobre era tragada en la tristeza, pero con venas abultadas levantadas por el orgullo.   La realidad se ha convertido en un calvario, es decir un caldero de aceite con superficie resbaladiza.

 

 En ese marco el ¡A Luchar!, es determinación de la "conciencia histórica", las subjetividades obreras y populares en lucha no quieren seguir viviendo en ese caldero. Además,  no están solicitando la representación de un vulgar forajido, ni mucho menos la presencia de un liderazgo caduco y envilecido especializado en producir sobre mentiras desde la garganta de Lucifer; cada vez  que se mencionan esta pila de mercaderes de uno y otro bando, uno recuerda al candidato mortadela transitando entre guardaespaldas, la carretilla sobrada de mortadelas pidiendo los votos en las elecciones del 06 de diciembre del 2020, en ese instante el espíritu de la República  certificó la infamia:¡Horror Vacui!.

 

Mientras las clases  trabajadoras viven con bombonas de oxígeno a la espalda, los acaudalados rojos viven bañándose de lujo. En el chavismo rico las navidades  tienen el sabor de la abundancia;  en la mesa de los pobres, un largo abrazo de lágrimas calladas. Para

negar este contraste abismal entre opulencia y miseria social se debe  estar bien cobijado, con el embozo de una pluma tarifada en dólares. Para completar ese cuadro de los últimos días en la Roma imperial, apareció la imagen de superbigote. La voz popular fue de un prolongado desconcierto; en ese tiempo, en  las calles y avenidas del país se percibió que  la señora dialéctica había muerto en la rueda de un casino. En lo históricamente dado, el centro de la tensión antagonista se libra entre un gobierno  neoliberal enfrentando las exigencias de las trabajadoras, la clase y sus conquistas son hoy el fardo más pesado al proyecto neoliberal que  blinda las capitalistas relaciones de poder. Su aparición espectral como regalo de navidad en medio de la catastrófica situación social provocó en los trabajadores clasistas el sabor de un sarcasmo expulsado por la garganta del diablo.  Como siempre,  abusar del poder es propio del narcisismo.

Estrujar la vida de las trabajadoras al máximo para luego doblarse en navidad a juguete en las manos de sus hijas  es infamia. En efecto, el sarcasmo  produjo rabia, la repulsa alojada y el estómago sublime agrietado por el hambre ardió y la arrechera hizo fuego colectivo en una fuerza productiva del trabajo cada vez más devaluada, más subvaluada.

 

VI.

Vuelvo con la movilización de l@s trabajador@s de la enseñanza desde el pasado 9 de enero , es lo menos que podría ocurrir en un país donde desapareció el ingreso de la familia venezolana, se ahogaron los salarios y se esfuman los sueños juveniles. Los maestros, profesores y obreros están agitados por una sensibilidad, herida hasta los huesos. No valen explicaciones de presuntos o supuestos especialistas, estrategas o abogados del diablo para justificar la negativa ante las justas exigencias del pueblo trabajador.  Una vida digna para la clase trabajadora venezolana, , no está contemplada en los voceros del capitalismo de garito. La clase obrera fue expulsada del estado social y en la calle están las respuestas de querer verse entre lazos de solidaridad de clase y leal a sus esperanzas.

 

No obstante, los  resultados de la historia revelan que la contradicción principal de la sociedad remite,  de un lado a un estado del capital grotesco en  acumulación acelerada y con la imposición de una legalidad represiva y penalizadora  y del otro extremo los trabajadores condenados a vivir en la borrasca del holocausto.

 

VII.

La  diferencia entre la opulencia y la pobreza viene cobrando mayor desfachatez y el descontento es la respuesta popular que viene expandiéndose como cotidianidad desobediente, el ¡ay vale!, es signo de indigestión ante el modo lujurioso de vivir de  los semiletrados del orden. Interpelar desde las calles de Venezuela  la conducta del anillado es y será un lugar común,   la producción subjetiva de un otro ¡A Luchar!. En tendencia,  el paño de la historia comenzó a entretejer una desobediencia obrera y popular  contra los salarios de hambre, contra el secuestro de trabajadores en la cárcel y en fin contra la criminalización de las protestas sociales .

 

La burocracia del poder político ha confesado su cualidad de rancios conservadores a las sombras del anillado, educados en la racionalidad instrumental de la 'política por arriba', no admite la potencia con que  emergió la movilización de la protesta nacional. En su estado de perplejidad, buscan las coartadas en los gansos negros y en ese orden complacerse con una explicación espiritista a la resistencia obrera contra los salarios de hambre. La movilización múltiple de la calle, ha dejado mal parados a los especialistas en propaganda, el objetivo de dispersar las fuerzas del magisterio quedó sin efecto. Pero además,  la conciencia histórica de la movilización tiene implicaciones de fractura interna en los aparatos de Estado, el abecedario oficial del dólar criminal, inflación inducida y guerra económica perdieron la capacidad cohesiva de los funcionarios y demás empleados públicos. En fin,  los señores de la propaganda queriendo salvar las pestañas del gobierno en el fuego, acusan hoy imperialismo de conspirar contra quienes  contradictoriamente garantizan la privatización de las empresas públicas, contienen  los salarios en el nivel del hambre y dolarizan las sobre ganancias.

 

VII.

Es público es notorio el maridaje del gobierno con el imperialismo, siendo así administrar las empresas estratégicas del Estado a lo "Chevron", será la lógica de apropiación de las riquezas nacionales. En ese sentido,  el encubrimiento interesado de los propagandistas ideologizados de la realidad, es  contradicho por los hechos. El imperialismo cogobierna la industria petrolera, en fin el gobierno es Made in Wall Street. En conclusión de este apartado, la multitud en  la producción de una 'política por debajo' y su experiencia de la democracia directa movilizada en todas las ciudades del país, los ha dejado como los leones afeitados del coliseo,  escamoteando el presente potencial de las clases subalternas, hilvanan  fantásticas supersticiones a lo babel, se tornan en la voz de las  azafatas sobre el avión ¡calma!,¡calma!, es sólo un soplo de los resentidos de abajo.

 

Una caracterización de la coyuntura indica que el descontento popular se viene  entretejiendo entre los maestros, obreros, profesores y los hombres del sombrero. En un país donde los trabajadores viven al borde del holocausto, el asunto del salario es la defensa más revolucionaria del momento. Los mandos viven en pedestales dolarizados,  mientras el trabajador se transmuta a despojo humano, las muestras de la vida cotidiana en hospitales son de trabajadores llevados a los extremos de la sobrevivencia. La tristeza es un sentimiento en el corazón de los trabajadores doblado a rabia, y sus resistencias son evocaciones al orgullo Republicano. Lo evidente no necesita presentaciones, la moral y luces han vuelto a representar la reserva moral de la República  y afortunados serán aquellos a los que la historia reconozca como litigantes.

 

IX.

Finalmente,  El maestro venezolano es hoy el rostro histórico de la abnegación moral, quién no recuerda a su mentor o mentora de la moral y de las luces. Conservar la vocación moral por la enseñanza, en medio de esta batahola social, es de "gesta heroica".

 

En la calles estarán quienes tienen el derecho a recibir el desgarro por la emergencia de un otro ¡A luchar!  A decir verdad, el estado de intereses constituidos en el poder no va a  suicidarse, ni mucho menos aceptará retroceder su plan neoliberal de ajustes económicos. La escena política de los mandos políticos hoy se colma de espectros, léase Drácula y bigote. El colmo es llegar al extremo de no saber representarse a sí mismo,   transmutarse a mendaz mortaja es  reconocerse en un devenir donde la rueda trituradora de la historia sellara su destino lapidario.

 

En ese orden y en el devenir de la historia, la lucha de clases será la primera categoría  en la interpretación de la coyunda política. En los futuros acontecimientos  a) Ell se manifestará con la fuerza de masas que hoy adquieren las protestas sociales del continente, y cuando los comunes crezcan en espiral no necesitarán representaciones postizas,  ni de la derecha ni de una izquierda derechizada.

b) En su connotación estratégica se identifica en su impugnación a lo neoliberal, privatizador, así como la deplorable subordinación a los intereses extranjeros y c) En la contradicción de los trabajadores contra las mafias oligarcas del gobierno.

 

Al final ¡la epifanía multitudinaria de la moral y las luces comenzaron!, la protesta social  adquieren nuevos bríos y las luchas concretas se entretejen, "son  un sólo pueblo" y  en el nos sentimos representados.

 

He dicho.

 

Por un ingreso digno a los trabajadores de la enseñanza.

 

Libertad para los presos políticos y trabajadores detenidos.

 

Por un movimiento popular autónomo, clasista y beligerante.

 

¡Señora ministra  de educación, solicite  ser interpelada!

 

Luis A Ramírez.

 

0424-496 56 60

Puerto Cabello ,

11 de enero 2023.

lramirezveliz@gmail.com

Twitter@LuisAlb32398830.

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